La economía mundial está en crisis de nuevo. Y más que halla empezado una nueva crisis, la anterior nunca termino. Esto ha suscitado debates sobre el control de los déficit fiscales de nueva cuenta, que si bien esto es un tema crucial, el llamado es que esta crisis ha demostrado que la disfuncionalidad está en el corazón de las finanzas, por lo que reformar el sistema financiero es urgente. Así, se crítica severamente el accionar de la agencias calificadoras, las cuales fueron incompetentes y sin embargo siguen operando como si nada. También se hace hincapié sobre la introducción de normas acordadas internacionalmente sobre la quiebra de los Estados o una de las más importantes, que es la regulación de los productos financieros complejos. Porque si bien una política fiscal puede ser efectiva en el corto plazo, no puede por sí sola resolver los problemas estructurales que ha provocado la crisis actual.