A través de este informe, el Banco Mundial señala que aunque América Latina tiene una tasa per cápita de empresarios mayor a la de otros continentes, la cantidad de emprendedores sigue siendo muy baja, debido al férreo control de mercado que tienen las trasnacionales latinoamericanas.
Mientras que en la región las empresas con 40 o más años de actividad emplean a unas 110 personas, en Asia Oriental emplean a cerca de 170, en Europa oriental a alrededor de 220 y en países de alto ingreso a 250. En este sentido, el Banco Mundial es contundente y advierte: la realidad empresarial en América Latina se ve entorpecida por la baja innovación. Para combatir este problema, la institución internacional recomendó a los gobiernos de la región impulsar políticas que fomenten las pequeñas y medianas empresas, así como crear legislaciones en las que se obligue al sector empresarial a desarrollar proyectos en favor de la innovación y el emprendimiento.