El G20 de Buenos Aires se abre con agendas nacionales más que agendas globales. México firmara su tratado de libre comercio ma non troppo con Estados Unidos en el que México promete respetar 70 años la autoría de los inventos. Estados Unidos de su lado y en reciprocidad le mantiene los aranceles de 25% y 10% al acero y al aluminio. Se mantiene una guerra comercial entre Estados Unidos y China y entre Estados Unidos y la Unión Europea y la postura de Estados Unidos frente a la OTAN es de hostilidad, habiéndose abierto la posibilidad de que Alemania y Francia organicen una fuerza militar fuera de la OTAN en vista de la simpatía americana a las posturas rusas en Europa Central.
Un tema que divide es el asesinato del periodista Khashoggi en el consulado Saudí en Estambul, que Turquía insiste que fue un asesinato de Estado por los Saudíes. Todos estarán sentadas juntos con el gran negociante haciendo lo posible porque no se note. Trump tiene importantes lazos de negocios con los saudíes. Seguin Business Insider, dijo durante la campaña del 2015 "I get along great with all of them; they buy apartments from me," Trump said. "They spend $40 million, $50 million. Am I supposed to dislike them? I like them very much!" (https://www.businessinsider.com/trump-saudi-arabia-financial-interests-ties-hotel-bookings-sales-2018-10).
La interrogante es si la protección a los saudíes saldrá a la luz o si lo mantendrán fuera de los reflectores. La más reciente aparición de Trump en la Asamblea General de Naciones Unidos en setiembre del 2018, generó carcajadas de los jefes de Estado del resto del mundo, experiencia que sería mejor que no se repitiera. El mundo resumido en el G20 no protegerá a un estado asesino. Tampoco podrá evitar los problemas económicos de las economías altamente endeudadas frente al alza de la tasa de interés y la caída del comercio internacional.
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Otros temas espinosos son los aranceles contra las importaciones de la UE. El hecho de haber roto con el sistema multilateral de comercio es poco apreciado por Europa y por los latinoamericanos, ahora perros falderos de Washington. La ventaja de Trump es que los tres gobiernos latinoamericanos no tendrán posición adversa mientras estén estos gobernantes. Su desventaja es que los asiáticos si la tendrán y ellos pesan mucho.
En este G20, en medio de alzas de la tasa de interés que pueden conducir la economía mundial a una recesión, no se va a discutir temas financieros que, como se ve en la tabla, son muy serios. El alza de la tasa de interés va a repercutir sobre los costos de la deuda de los países ricos altamente endeudados de Europa, Canadá, Estados Unidos y Japón. Cada 1% de alza de la tasa de interés es igual a 1% del PIB de trasferencia del fisco a los acreedores, con el consiguiente ajuste fiscal, dadas las políticas de metas de inflación y los niveles de deuda de 100% del PIB promedio que tienen los países del G7.
Un tema que se ha esquivado, son los problemas financieros de la gran banca demasiado grande para quebrar, cuyos precios de las acciones vienen en caída desde el 2008. Trump está protegiendo a la banca americana (tres bancos de 30) pero no puede proteger al resto del mundo. Basilea III ha demostrado ser un fiasco que mira los créditos bancarios mientras la gran banca se dedica en realidad a las inversiones. Esto no se tocará. Mientras tanto la diplomacia del Yuan seguirá. China ya tiene más bancos “demasiado grandes para quebrar” que Estados Unidos, pero sobre todo, lo que tiene es liderazgo mundial, que Estados Unidos ha perdido y dinero para hacer efectivas sus ofertas.
Veremos más acuerdos bilaterales que un acuerdo multilateral que ahora será desconocido por Washington, como está desconociendo todos los otros acuerdos multilaterales que tiene. Esta reunión puede ser una pérdida de tiempo, que parece, o la ocasión para que el mundo le ponga un pare a los crímenes de los saudíes y reconvenga una postura multilateral más fuerte de parte de todos sus socios, en particular del fundante del multilateralismo. Debe recordarse que el anfitrión de este G20 vetó la participación a unas 60 personas que asistirían a la preparatoria de la cumbre de la OMC en diciembre del año 2017, y a varias les negó la visa o las deportó, y que por tanto carece de un cartel democrático internacionalmente reconocido.