Los distintos acontecimientos poIíticos que se han producido estas últimas semanas en América del Sur modifican las expectativas en el futuro proceso de integración. En el campo internacional el multilateralismo comercial no pasa por su mejor momento.
EEUU ha tomado la decisión de llevar adelante acuerdos plurilaterales, especialmente para competir en mejores condiciones frente a China, que ostenta el primer lugar como exportador de bienes y de productos manufactureros. En el campo multilateral EEUU sufría las posiciones divergentes, especialmente de China e India.
En el campo regional el triunfo de Macri en la Argentina, la derrota del gobierno venezolano en las elecciones legislativas y, especialmente, la crisis política en Brasil marcan cambios significativos para el proceso de integración y los futuros acuerdos comerciales. La actitud del nuevo gobierno argentino con respecto al Mercosur es una incógnita. Lo que parece relativamente claro es que va a caminar en la línea de los EEUU, con un viraje muy profundo con respecto a los gobiernos kirchneristas.
Uruguay tiene acuerdos comerciales con el Mercosur, tratados de libre comercio con México y Chile y diversos acuerdos en el ámbito de la Aladi. Hay corrientes dentro del gobierno y, seguramente, toda la oposición que están clamando por participar en los acuerdos comerciales que lleva adelante los EEUU.