2021: Year of Living Dangerously?
El 2020 fue un año desastroso para gran parte del mundo. La crisis ha expuesto realidades no reconocidas anteriormente, incluyendo debilidades y vulnerabilidades. La pandemia agravó la pobreza, el hambre y la vulnerabilidad al reducir los puestos de trabajo, los medios de subsistencia y los ingresos de cientos de millones de familias.
A medida que se reanudaron las actividades económicas, se han acentuado las barreras a la producción, la distribución y el suministro, los medios fiscales limitados, la reducción de la demanda, la deuda y el desempleo, así como la reducción y la incertidumbre de los ingresos y los gastos.
El principal reto es de carácter fiscal. Las desaceleraciones económicas han reducido los ingresos fiscales, por lo que se requiere más deuda interna para aumentar el gasto necesario para asegurar que las recesiones no se conviertan en depresiones prolongadas.