Por primera vez, líderes y representantes de países africanos se han reunido en Nairobi, Kenia, para abordar la crisis climática a nivel regional, auspiciados por la Unión Africana. El objetivo principal es establecer una posición común de las 54 naciones africanas de cara a la próxima Cumbre del Clima de las Naciones Unidas, COP28. A pesar de que África ha contribuido mínimamente a las emisiones de gases de efecto invernadero que causan el cambio climático, la región sufre de manera desproporcionada sus efectos debido a la pobreza y la falta de recursos para hacer frente a la crisis.
La cumbre africana ha sido objeto de críticas de organizaciones de la sociedad civil, que acusan a gobiernos occidentales, consultoras y organizaciones filantrópicas de impulsar una agenda prooccidental a expensas de África.